Nada más rico que llegar a la casa y tomarse una taza de té. Ahora que llegó el invierno cambiamos todas las bebidas heladas por esta. La lata es que el té se caracteriza por su tinte y su mancha puede ser un caos cuando cae encima de nuestras prendas ¡Acá te damos los consejos para que sepas enfrentar su lavado!
Ya no pondrás más el grito en el cielo cuando después de una sobremesa se derrama un té en tu mantel blanco impoluto, ni cuando en la mañana el líquido se da vuelta en tu camisa impecable antes de dirigirte a tu pega. Tampoco cuando estés acostada en tu cama y empape tus sábanas ¡No más! Eliminar manchas de té no es difícil, solo que hasta ahora, nadie te había contado los secretos. Lo mejor: muchos de ellos son caseros, así que complementándolos con los productos adecuados que encontrarás en nuestro pasillo de limpieza harás maravillas.
A continuación, amigos, los tips más efectivos:
- La sal es un gran aliado, pero solo en manchas recientes. Si apenas se derrama tu té sobre tu prenda, no dudes que el salero será fundamental, echa sal unos minutos para que absorba la mancha y después lavas como de costumbre.
- Moja un algodón con agua tibia y frota suavemente la mancha en tu prenda, esto con el fin de ir suavizando la mancha y que pierda el tinte poco a poco. Un tip efectivo es usar jabón de guagua y frotar delicadamente. Te puedes ayudar con una escobilla de dientes suave, hasta que la mancha desaparezca.
- En cambio, si la mancha lamentablemente está seca, ¡no te desesperes! También hay solución, ya que puedes untar un poquito de agua oxigenada en un algodón y aplicar sobre la mancha suavemente hasta que salga. Después lavar as always.
Todos estos consejos son para que complementes a tu lavado de detergente ¡Cuéntanos cuál te funcionó mejor!
