Un elemento que no siempre le damos la importancia que tiene es la cortina de baño, y sí, la merece. La cortina es algo que es difícil de mantener, ya que está expuesta a un ambiente muy húmedo, donde es probable que le salgan hongos o moho, además de recibir los restos de champú y jabón ¡Tu cortina y el forro plástico no los tendrás que reemplazar si sigues estos tips que te aseguramos que los dejarán impecables!
¡Acá te damos el paso a paso para que quede como nueva! Y, aunque no lo creas… puedes lavar cortinas de género y de plástico en la lavadora.
En un recipiente grande, o de hecho en la misma tina, deja tu cortina en remojo por varias horas (ideal si es toda la noche). Antes de este paso, para remover los hongos o la suciedad que se acumula en las costuras puedes pasar una escobilla de dientes que no uses con un poco de cloro.
Después de sacarla de sus largas horas de remojo, mete la cortina en la lavadora. Para esto, es necesario agregarle peso al tambor: unas toallas o unas frazadas ayudarán en el movimiento de la máquina a remover los restos de suciedad gracias a su textura abrasiva.
Para eliminar olores o desinfectar la cortina plástica o forro (que es un escenario que te recomendamos si está expuesta a excesiva humedad, como en un baño sin ventanas), agrega un poco del milagroso vinagre blanco al enjuague final, esto tiene un alto poder desinfectante y te ayudará a eliminar las diferentes manchas.
En el caso de las cortinas de tela éstas resisten muy bien a varios ciclos de lavado, incluso a temperaturas de 30 o 40 grados. Sólo agrega tu detergente a elección y ¡Listo!
Como dato adicional, te recomendamos que nunca centrifuges tu cortina ya que esto muy agresivo y podría romper el tejido o resquebrajarlas. Siempre estíralas y sécalas al aire libre. Las de género pueden ser al sol y las de plástico siempre a la sombra.
Con estos datos alargarás la vida útil de tu cortina de baño ¡Ponlos en práctica y cuéntanos cómo te va!