El Coronavirus nos ha puesto a tod@s más exigentes con la limpieza y desinfección del hogar, ya que de hacerlo correctamente, disminuimos la probabilidad de contagiarnos. Esto se debe a que los desinfectantes actúan y dañan la estructura del virus, impidiéndole infectarnos. Pero, ¿sabemos realmente cómo funciona el proceso de desinfección de superficies y objetos? Hay algunos factores que debemos considerar si queremos hacerlo de forma correcta y efectiva, aquí te los enseñamos.
Lo primero, antes de desinfectar cualquier superficie u objeto, es que estos deben estar limpios, para eso puedes pasar un paño o esponja con limpiador o jabón, y luego pasar a la desinfección.
Para una correcta aplicación de los desinfectantes, debes considerar lo siguiente:
- Debemos humedecer la superficie con el desinfectante que vayamos utilizar para que quede bien aplicado y podamos hacer una limpieza efectiva. Los desinfectantes actúan sólo donde se aplican. Hay superficies que hay que rociarlas completamente para limpiarlas.
- Lo segundo es respetar el tiempo de actuación que se indica en la etiqueta del producto desinfectante. Muchas veces veces se cree que la superficie quedará limpia con una sola pasada, pero no siempre es así, los desinfectantes actúan por un tiempo determinado. Debes esperar el tiempo que corresponda según cada producto porque hay gérmenes que son muy resistentes y necesitan un tiempo específico para poder ser eliminados por completo.
- Otra regla fundamental es usar la dosis correcta para que el producto sea eficaz. Hay desinfectantes que son muy concentrados, los cuales tienen que diluirse previamente antes de ser utilizados. Por otro lado, si utilizas una dosis demasiado débil, el desinfectante puede no ser efectivo. Si la concentración es demasiado alta, puedes dañar la superficie por los ingredientes abrasivos, además de ser peligroso para tu salud.
- Ojo con la fecha de vencimiento de los productos, si lo utilizas después de haber alcanzado la fecha, el desinfectante ya no es seguro. Siempre compruébalo antes de utilizar cualquier producto de limpieza.
- Si aplicas desinfectante con un paño, este debe ser lavado a mano inmediatamente después de uso, idealmente con agua a temperatura sobre 60º para eliminar los gérmenes y el exceso de producto.
- Siempre aplica cualquier producto con guantes y preocúpate de ventilar el lugar que estés limpiando.
- Para desinfectar correctamente puedes usar soluciones diluidas de cloro (5 cucharadas de cloro por 4 litros de agua) o soluciones con al menos el 70% de alcohol.
Recuerda seguir estos consejos a la hora de desinfectar y te recomendamos, además, que SIEMPRE tomes las preocupaciones y recomendaciones que aparecen en las etiquetas de cada producto de limpieza.